Cliente moroso se entiende como la persona que, tras disfrutar del bien o servicio que ofrecemos, no ha desembolsado la cantidad que se pactó pagar por nuestro servicio o bien.
Aunque la prevención es la mejor manera de no tener futuros problemas con un cliente que no pague las facturas, y más adelante os daremos claves para ello, no siempre es sencillo prevenirnos de un cliente moroso.
Por ello, en este artículo os daremos los consejos que puedes hacer si el cliente moroso ya es una realidad, o si no quieres que lo sea.
Ya existe el cliente moroso
Contratar un seguro de crédito o comprobar su solvencia son opciones adecuadas para solucionar problemas de futuros clientes morosos pero, si ya tienes uno puedes:
- Averiguar los motivos del impago. Mediante negociación y diálogo se puede conocer la situación del cliente moroso. En este caso se debe ser flexible y buscar alternativas como la opción de fraccionar la deuda.
- Anticípate. En este caso os recomendamos tener en la recámara una estrategia de anticipación para gestionar estos clientes morosos según experiencias vividas y datos reales. Así podréis actuar más rápido.
- Intenta tratar negociación como si no fuera un cliente moroso. De esta manera no predominará el rencor o la venganza. Lo importante es cobrar, por lo tanto, os recomendamos mantener abierto el diálogo e insistir.
- Puedes proponer un intercambio de servicios. Si no puede pagarlo de manera monetaria, siempre puedes pedirle que salde la deuda a cambio de lo que el cliente moroso sepa o pueda hacer.
- Siempre está la opción judicial. No os frustréis si no veis resultados con el cliente moroso. Hay una última opción con un proceso judicial, pero será más costoso y perjudicial.
Cómo puedo detectar a un cliente moroso
- Puedes buscar la información que aparece en Google o sus redes sociales
- Solicita un informe de solvencia, en Ibercheck lo realizamos por menos de 30 euros
- Contrata un seguro de crédito para que te indemnicen si no recibes tus pagos
Quiero prevenirme ante un cliente moroso
- Crea una política de cobro. Especifica tus condiciones en las facturas; no olvides incluir el método, las condiciones de pago y el período para hacerlo.
- Digitaliza el proceso de facturación
- Controla los pagos, ya sean facturas pendientes de pago o las que ya hayan sido abonadas.
Instaura el marketing de cobro. Es decir, incorpora bonificaciones por pronto pago o diferentes métodos de pago, descuentos por pago por adelantado o planes de pago mensuales, semanales, etc.
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